Hoy es un día un poco triste, porque triste es cada vez que muere alguien, sobre todo si es tan joven como lo era Heath Ledger. Dicen que ha sido un accidente, pero también dicen que había pastillas a su alrededor cuando le encontraron. Puede que quede como una de esas muertes enigmáticas y trágicas de personajes jóvenes, guapos y famosos que tan inexplicables nos resultan casi siempre. A mi me ha recordado a la muerte de Michael Hutchence, cuyo suicidio también me resultó extraño y conmocionante, como me habría impresionado la muerte de Jim Morrison, si hubiese estado en el mundo por aquellos tiempos, y la de muchos más.
De ellos siempre nos quedará el recuerdo de su imagen perfecta, en la plenitud de su existencia, es lo que tiene morir pronto, que se deja un bonito cadáver, como cuentan que decía James Dean, otro de tantos.
Heath Ledger hizo todo tipo de películas en su corta vida, unas mejores y otras peores. Yo creo que con el tiempo se habría ido inclinando cada vez más hacia un cine menos comercial pero más personal, ya apuntaba maneras. En cualquier caso nos ha dejado muy interesantes interpretaciones. Pero para mí, entre todas destaca su papel en "Los Amos del Dogtown", película para mi mítica y de culto, en la que hacía el papel de Skip Engblom, genial fabricante de tablas de surf y precursor del skate. Os dejo con una imagen de la película, y con su sonrisa, difícil de olvidar.
Si, pero hace poco murio tambien Brad Refno ( el niño de "el cliente") y nadie se ha enterado, fijate tu.
ResponderEliminarSalu2